Lo bueno de esta receta es que admite multitud de versiones, tantas como verduras a combinar que tengamos en la nevera. Nosotros aprovecharemos el contenido de la cesta y le añadiremos pollo y pasta, así tendremos todos los nutrientes necesarios para una comida en un solo plato.
Ingredientes para cuatro personas:
– Cuatro ramitas de apio
– Un par de cebolletas
– Un diente de ajo
– Un par de tomates
– 100 gr. de kale
– 100 gr. de acelgas
– 100 gr. de nabizas
– Un par de zanahorias
– Una pechuga de pollo
– Un puñado de pasta para sopa (lluvia, lágrimas…)
– Un litro de caldo de pollo o de verduras
– Una cucharadita de pimentón
– Un chorrito de salsa de soja
– Un alga nori (opcional)
– Aceite de oliva y sal
Preparación:
Como en cualquier guiso, la base de esta sopa será hacer un buen fondo sofriendo bien las verduras. Para ello ponemos en una olla un chorrito de aceite de oliva, lo calentamos e incorporamos el diente de ajo en láminas para que coja sabor, Antes de que se queme añadimos el apio, las cebolletas y las zanahorias bien picados, removemos bien, tapamos la olla y bajamos el fuego para que se vayan pochando lentamente.
Mientras tanto lavamos las verduras de hoja y las cortamos en juliana muy fina. Abrimos la olla, echamos la cucharadita de pimentón e incorporamos estas verduras al guiso. Seguimos removiendo y tapamos de nuevo la olla con el fuego muy bajo para que suelten bien su agua. A los cinco minutos podemos añadir los tomates pelados y cortados en daditos.
Fileteamos la pechuga de pollo y la pasamos por una sartén. La desmenuzamos y la reservamos.
Cubrimos las verduras con agua y dejamos que hierva unos 5-6 minutos; seguidamente vertemos el caldo de pollo o verduras, el chorrito de la salsa de soja y y una vez que rompa a hervir lo quitamos del fuego.
Para servir, cogemos un bol echamos la sopa y decoramos por encima con el pollo desmenuzado y unos trocitos de alga nori.
