Como bien indicamos en el título el hinojo es una planta aromática con raíz en bulbo cultivada en todo el Mediterráneo desde hace siglos. Además, no resulta extraño verla cuando damos un paseo por el monte ya que suele crecer de forma espontánea en las veredas de los caminos.

Se trata de una planta muy apreciada en la cocina ya que podemos aprovechar todas sus partes y por eso aparece como ingrediente en numerosas recetas. Si a todo esto le sumamos que tiene muchas propiedades medicinales, podemos decir que el hinojo está de moda.

Tenemos que distinguir entre los hinojos salvajes y los cultivados: Como decíamos, los primeros crecen espontáneamente y únicamente podemos aprovechar los tallos y las semillas, mientras que de los hinojos dulces o cultivados podremos utilizar absolutamente todo, ya que está considerada una hortaliza con gran valor aromatizante. Del la raíz en forma de bulbo le brotan unos tallos tiernos y crujientes con un sabor anisado.

El consumo de hinojo tiene numerosos beneficios: Regula el sistema digestivo, tiene un alto poder diurético y nos ayuda a eliminar líquidos y toxinas del organismo, tomado como infusión nos abre el apetito, ayuda a combatir las infecciones bucales e incluso se recomienda para las menstruaciones dolorosas.

En cuanto a su uso culinario podremos incorporarlo a cualquier guiso o potaje y acompaña perfectamente a cualquier pescado dándole un toque anisado muy especial. El tallo crudo y troceado se puede incorporar a las ensaladas o hervirlos y comer como si fuesen espárragos. El bulbo lo mismo, lo podemos añadir a cualquier plato frío sustituyendo la cebolla o cocinarlo igualmente; va muy bien con legumbres ya que suelen dar algo de flatulencia.