A finales de abril y principios de mayo trasplantamos las calabazas para este otoño-inivierno en la Finca Aqulina. Cocretamente unos 100 plantones de las variedades Gernika, buttenut y cacahuete.
Después de haber cultivado otras clases, definitivamente, nos decantamos por estas por varios motivos: Bien embodegadas aguantan bastantes meses de cara al invierno, su carne anaranjada es muy dulce y cremosa y, como iremos mostrando en diversas recetas, admite multitud de preparaciones culinarias. Pues bien, la pasada semana por fin sacamos tiempo para ir a cosecharlas y hemos conseguido guardar unos 900 kilos para las Cestas de Lola hasta la primavera.
Como ya sabemos, las calabazas pertenecen a la familia de las cucurbitáceas al igual que las sandías, los melones, los pepinos o los calabacines. Su componente principal es el agua con lo que, unido a su bajo contenido en hidratos de carbono y a su casi inapreciable cantidad de grasa, hace que sea un alimento con escaso aporte calórico. Sin embargo, constituye una buena fuente de fibra lo que nos dara la sensación de saciedad y mejora el tránsito intestinal por su alta presencia de mucílagos.
En relación con las vitaminas las calabazas con ricas en beta-caroteno y vitamina C. Presenta cantidades apreciables de vitamina E, folatos y otras vitaminas del grupo B. Además contiene minerales como potasio, fósforo, magnesio y, en menor cantidad, calcio y hierro.
Para conservarlas lo ideal en envolverlas en un film transparente y meterlas en la nevera. De esta manera aguantarán hasta una semana sin problema. Pero también se pueden escaldar y guardarlas en el congelador con lo que conseguiremos alargar su vida útil un mes.
Y lo mejor de todo, como os hemos dicho anteriormente, las calabazas nos ofrecen multitud de posibilidades en la cocina. Las clásicas cremas, en arroces o pastas, combinadas con otras verduras incluso para hacer pistos, para hacer salsas como en la receta de esta semana, gratinadas al horno con queso y, como no, podemos hacer cantidad de postres utilizando calabaza.
Pocas verduras son tan versátiles como las calabazas así que aprovechemos su temporada grande que comienza ya mismo.